lunes, 4 de mayo de 2009


SE CELEBRÓ LA ASAMBLEA 2008 DE LA CONFEDERACIÓN DE PS-CARITAS DEL ECUADORLos días 27 al 29 de octubre se celebró en Betania (Quito) la Asamblea Anual de las Pastorales Sociales - Caritas del Ecuador. A ella asistieron 64 personas, la mayoría responsables de la acción social en las distintas Iglesias locales del país. También se contó con la presencia de los obispos miembros de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (CEPAS), presidida por el Obispo de Loja, Monseñor Julio Parrilla. Las conclusiones de la Asamblea pueden encontrarse en la Memoria Asamblea 2008.
El encuentro se inauguró la mañana del lunes 27 con una exposición de Mons. Parrilla, titulada "Discípulos y Misioneros de Cristo desde la Pastoral Social - Caritas" que, además de motivar a los presentes por su importante contenido, ayudó a poner en relación nuestro trabajo con el núcleo de la fe, la esperanza cristiana y la tarea evangelizadora de la Iglesia.
La tarde de ese día se dedicó a reflexionar en grupos la cuestión de la incidencia social y política de nuestra acción social a partir de una presentación realizada por el director de la PS-Caritas de Babahoyo, Jesús Narváez. Entre otros conclusiones pudimos entender mejor la necesidad de distinguir entre incidencia pública (las obras sociales de la Iglesia son importantes en la vida cotidiana de muchos miles de ecuatorianos/as), la participación política (responsabilidad especial de los laicos que necesitan un mayor nivel de formación en Doctrina Social) y la legítima incidencia política de nuestros proyectos sociales.
Cáritas Española coordina la acción social que se ejecuta en las Diócesis y en las Parroquias mediante una serie de programas que buscan la promoción de las personas y grupos en situación de exclusión social: Personas sin hogar, parados, mayores, mujeres, niños, jóvenes, inmigrantes, reclusos, drogodependientes, enfermos de SIDA.

También en colaboración con Cáritas Internacional provee de ayuda de emergencia a aquellas personas afectadas por catástrofes naturales, hambruna, guerra o epidemias y acompaña desde la cooperación fraterna con las Cáritas hermanas la ejecución de proyectos de desarrollo en los países empobrecidos del Sur.

Desde este trabajo de cercanía, muchas veces nos sentimos obligados también a hacer presente en la sociedad y denunciar lo que ella tantas veces tiende a olvidar: el mundo de los pobres y excluidos.